Los ediles del PP de Albalat consuman la moción de censura a su propio alcalde
El de ayer era un día atípico en la política de la Comunitat Valenciana. El pleno de Albalat dels Sorells debatía la moción de censura presentada por seis concejales del PP contra su alcalde, Vicente Almenar.
La moción prosperó y el también popular José Rafael Tamarit fue elegio nuevo alcalde del municipio con seis votos a favor, cuatro abstenciones y un voto en contra. El duelo fratricida se reflejó en los discursos de Almenar y Tamarit, y en el público que apoyó a ambos. La tradicional tensión que acompaña a las mociones de censura fue en Albalat dels Sorells un reparto de aplausos para los intervinientes, y el respeto cuando intervenía el "contrincante".
El de ayer era un día atípico en la política de la Comunitat Valenciana. El pleno de Albalat dels Sorells debatía la moción de censura presentada por seis concejales del PP contra su alcalde, Vicente Almenar.
La moción prosperó y el también popular José Rafael Tamarit fue elegio nuevo alcalde del municipio con seis votos a favor, cuatro abstenciones y un voto en contra. El duelo fratricida se reflejó en los discursos de Almenar y Tamarit, y en el público que apoyó a ambos. La tradicional tensión que acompaña a las mociones de censura fue en Albalat dels Sorells un reparto de aplausos para los intervinientes, y el respeto cuando intervenía el "contrincante".
La secretaria leyó el orden del día y constituyó la mesa de edad, formada por el popular José Vicente Català y el portavoz del Bloc Nicolau Claramunt. Se leyó la moción de censura y el candidato que los seis ediles del PP proponían como alcalde, José Rafael Tamarit, intervino. El ahora alcalde aseguró que el de ayer era un día que "nunca jamás" hubieran "deseado que tuviera que llegar". Pero el deterioro de la "situación política" del grupo municipal y de las relaciones personales no dejaron otra alternativa para "garantizar la gobernabilidad" de Albalat dels Sorells que reestructurar el equipo de gobierno y a su alcalde. Tamarit aseguró que confiaron en Almenar tras las elecciones pero que no ocurrió lo mismo con el reparto de concejalías y el diálogo con el grupo.
Defendió que Albalat dels Sorells necesita un gobierno "cohesionado, unido y compacto" y un grupo que dialogue. Personas en las que lo importante no es "su vertiente individual" sino "integradas en un colectivo".
Almenar seguirá de concejal
Tomó el testigo Almenar quién repasó los resultados de las elecciones, las noticias sobre la crisis del grupo municipal y la posible moción de censura. Recordó las negociaciones con al dirección del PP y la contraoferta que realizó para alcanzar "una transición tranquila". No ha habido transición y ha perdido la alcaldía aunque ayer anunció que seguirá "siendo concejal" del PP.
El portavoz socialista, Carles Garcés, acusó también a los populares de anteponer los intereses de su partido a los del municipio lo que tachó de "falta de honor y honradez". Aseguró que la crisis popular ha derivado en la "ingobernabilidad del municipio". Indicó a Almenar que "la ceguera de poder" le ha conducido a esta situación pero afirmó que "ellos no son mejores". Cerró las intervenciones el portavoz popular, Tamarit, quien aclaró a Almenar que la moción no se ha presentado "por una cuestión personal" y le recordó sus intentos por reconducir la situación. Recogió el guante lanzado por el ex alcalde para explicar que esperaba que permaneciera dentro del grupo popular y que lo hiciera "sin personalismos, desde la unidad".
Noticia aparecida en el diario Levante-EMV
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