El pantano de Beniarrés se encuentra en uno de los niveles más altos del último cuarto de siglo

El pantano de Beniarrés es un excelente termómetro para conocer la salud de nuestras reservas hídricas. Por eso, nada mejor que acudir a él para comprobar de un simple vistazo la situación en que se encuentran dichas reservas, algo que preocupa especialmente en verano, que es cuando suelen acusarse las principales consecuencias de un estado de sequía.

A simple vista, el pantano parece encontrarse en las mejores condiciones, pero ¿qué hay de los datos?, ¿confirman esta aparente óptima situación de las reservas de agua del embalse de Beniarrés?. En primer lugar, hay que tener en cuenta la capacidad del embalse, que es de 27 hectómetros cúbicos, según información facilitada por la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), organismo de cuenca del que depende el embalse del Comtat.

A fecha de hoy, el volumen es de algo más de 19 hectómetros cúbicos, lo que supone que el pantano se halla al 72’32% de su capacidad total. La cifra es un 5% superior a la alcanzada el año pasado en esta misma semana, pero representa un incremento del 25% sobre la media de la última década, cuando se llegó a descender a niveles de 12 hectómetros cúbicos de agua embalsada, concretamente, en 2003, 2006 y 2007, tal y como reflejan las estadísticas que ofrece la CHJ.

Estos niveles, no obstante, contrastan con la situación que se da en la actualidad, que invita, incluso, a conocer el paraje y el propio embalse más de cerca. Son muchas, de hecho, las personas que lo frecuentan, sobre todo ahora en verano, puesto que el acceso a la coronación del pantano es libre y de dominio público. Tanto es así, que en ocasiones no es extraño ver a gente practicando la pesca deportiva y hasta tomando el sol, como si de una playa se tratara.

Otra cosa son las visitas institucionales, que incluyen un recorrido guiado por las instalaciones y tienen que se autorizadas por la propia Confederación.

Noticia publicada en el diario Ciudaddealcoy.com